Saludos,
aficionados. En este espacio no relativista trataré de objetivizar de forma
amena los recovecos de esta frecuentemente incomprendida y en perpetua crisis
(a juicio de los entendidos) forma de entretenimiento llamada rol.
Es posible
que la mayoría de vosotros y vosotras no necesitéis una puesta al día de
términos, pero aún así me explayaré un poco para que los pasajeros recién
embarcados conozcan mejor el itinerario a seguir por esta publicación.
Los juegos
de rol (o role-playing games, en el planeta anglosajón) son, como su nombre
apunta, juegos de interpretación de papeles. Dados una ambientación y un
contexto (los cuales constituyen un juego concreto), los jugadores crean, interpretan
narrativamente y orquestan entre todos las aventuras y vivencias de dichos
personajes dentro de la ambientación propuesta por el juego en cuestión. Sí,
tal y como suena, no parece muy diferente de jugar a policías y ladrones o a
cuando, de niños, jugábamos a ser superhéroes, Caballeros Jedi o Guerreros del
Espacio. Ahora llegan las diferencias.
LAS REGLAS DEL JUEGO
Para dar un toque de imprevisibilidad
y realismo, y para evitar disputas tipo “¡Bang! ¡te he dado! ¡no! ¡no me has
dado!”, cada juego consta de un sistema de reglas con base estadística mediante
las cuales se definen y limitan las capacidades de los personajes. De ese modo
también se diferencian de los jugadores que los interpretan.
Así una diseñadora gráfica que quiera
interpretar a un avezado piloto de cazas no necesitará un curso de aeronáutica
para saber cómo su personaje puede esquivar las andanadas de tiros del caza
enemigo sin empotrarse contra una montaña. Aquí es donde entran en acción esos
bonitos dados poliédricos de múltiples caras. Se usan para generar resultados
aleatorios que luego se comparan con las estadísticas del personaje, para de
ese modo añadir esa pizca de azar que hace que apretemos los dientes en el
cine.
Mediante las reglas de cada juego, los
jugadores definen las capacidades de sus personajes en base estadística,
creando una sensación de realismo e imprevisibilidad que les implica más en la
acción.
Otro elemento importante en el
rol es la figura del Director de Juego, también llamado Narrador/a, Master o
Guía. Uno de los jugadores, usualmente el que mejor conoce el juego y sus
reglas, o el que dispone de más tiempo libre (¿alguien se siente aludido/a?),
asume el papel de Narrador/a.
En lugar de interpretar un
personaje dentro del contexto de la ambientación, el Director de Juego se ocupa
de organizar la línea argumental, describiendo a los demás jugadores lo que sus
personajes ven, los resultados de sus acciones y, en general, dando vida al
mundo por el que ellos se mueven, interpretando a los personajes secundarios
(desde el villano de la historia hasta el mercader del pueblo, pasando por la
camarera del bar, los matones callejeros y cualquier otro habitante del mundo
ficticio en el que se desarrolla la acción) con los que los personajes puedan
encontrarse en sus aventuras. Del mismo modo, es trabajo del Narrador/a hacer
de árbitro de las reglas e interpretar las tiradas de dados. Sí, puede dar la
impresión de que los Guías trabajan y los jugadores disfrutan, pero oye, si el
papel de Master no fuera divertido, no habría tantos guionistas, escritores ni
directores de cine ¿no?
LO IMPORTANTE ES
PARTICIPAR
Sin duda, una de las
características definitorias de los juegos de rol es la ausencia de “ganadores”
y “perdedores”. No es un juego competitivo, sino cooperativo. Las victorias las
obtienen los personajes según las metas que los jugadores se hayan planteado
para ellos (un contrabandista intergaláctico puede querer fortuna y gloria y
una guerrera puede buscar restaurar el honor de su familia, por ejemplo) pero
nadie “gana” o “pierde”. La meta es disfrutar interpretando a tu alter ego a
través de una serie de aventuras, emocionarte con sus logros y fracasos y, en
general, disfrutar de forma activa lo que normalmente se hace de forma pasiva
cuando vemos una película o leemos un buen libro.
Y AQUÍ EMPIEZA TODO
Para las
personas que no necesiten esta larga introducción al maravilloso mundo de la
narración interactiva, les propongo un viaje a lo largo de las diferentes
posibilidades meta-existenciales a través de los análisis que ofreceré en los
diversos artículos de este blog.
Aquí analizaremos los diferentes juegos,
con énfasis en las posibilidades que nos ofrecen de cara a construir historias.
Del mismo modo, en este no-lugar escribiré diversos estudios y análisis en
torno a las variadas temáticas que circundan la afición, desde consejos a
Narradores y jugadores hasta reflexiones sobre el arte de contar historias. Sí,
tengo intención de marcar un tono más bien didáctico, disfrutadlo.
He de destacar que la ciencia-ficción va a
tener un marcado protagonismo, aunque ocasionalmente algún artículo sobre
fantasía épica tendrá su lugar en este no-espacio (la calidad no entiende de
géneros). Sin más dilación, ajusten sus visores y disfruten del viaje.
Por cierto, el cómic y la imagen de cabecera han sido diseñados con mucho mimo por Aurora ¡Gracias!
ResponderEliminarEstán GENIALES! Enhorabuena! Lo tendré de referencia. Ojalá mis tiempos de este momento de mi vida me permitieran darle más, mucha mas atención y retornar al menos a los caminos del rol virtual, pero no puedo, por ahora. LOS EXTRAÑO A TODOS. Pero siempre, Volveremos.
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